Las principales funciones de un barniz o laca empleado en el sector del automóvil son las siguientes:
Embellecer la superficie a través de un acabado concreto: brillante, mate o satinado.
Potenciar los efectos de la pintura (colores metalizados, perlados, etc.).
Sellar y proteger la superficie.
Aportar dureza, resistencia y durabilidad para soportar las agresiones a las que se ve sometida cualquier pieza del vehículo (condiciones ambientales, pequeños roces, etc).
Características generales de los barnices
El barniz para coche siempre cumple las mismas funciones, aunque existen distintos tipos de lacas que particularizan sus propiedades y acabados para adaptarlo a cometidos distintos. Sus principales características son estas:
Están formados por resinas acrílicas termoplásticas o vinílicas con sistemas de pintado al disolvente o al agua. Las lacas al agua llevan pocos años en el mercado, por lo que su tecnología aún no está totalmente desarrollada por todos los fabricantes. No obstante, ya hay marcas que lo comercializan con garantías de calidad.
Son productos nocivos para la salud y el medio ambiente, con lo cual su aplicación precisa de la utilización de EPIs (mascarilla con filtros químicos, guantes de nitrilo, etc.) y de las medidas de prevención colectiva necesarias (sala de mezclas, aplicación en cabinas de pintura o plenums, etc.)
El residuo generado tras la aplicación debe gestionarse de forma adecuada (separarlos, no realizar vertidos, etc.) para cumplir la normativa vigente y contribuir al cuidado del medio ambiente.
Tipos de barniz para coche
De forma general, los barnices se pueden clasificar según su contenido en sólidos, su función específica y su sistema de secado.
Según su contenido en sólidos
El contenido en sólidos determina el espesor de la capa final de producto que quedará tras el secado. Cuanto mayor sea el contenido en sólidos, mayor será la capa resultante, menos manos de productos se han de aplicar y menos contaminante es la laca.
Actualmente, los barnices comercializados son los de altos sólidos o HS (del inglés high solid) o los de ultra altos sólidos o UHS (del inglés ultra high solid). Los barnices de medios y bajos sólidos (MS y LS, respectivamente) ya han quedado en desuso.
Según su función específica
Según su función específica, las lacas se pueden clasificar del siguiente modo:
Barnices de secado rápido o ultrarrápido. Como su nombre indica, son barnices diseñados para que curen en un tiempo inferior a otras variantes. Está especialmente indicado para el pintado de piezas sueltas o trabajos que requieren rapidez de ejecución, siempre y cuando el número de componentes por pintar no sea excesivo (caso en el que pueden notarse los empalmes entre piezas).
Barnices antirrayas. Son utilizados por los fabricantes de vehículos en modelos y versiones de gama superior con el objetivo de aportar calidad al acabado del vehículo. Estos barnices poseen una mayor resistencia mecánica frente a roces y arañazos, aunque esto también supone que cuesta más de lijar.
Barnices de alto brillo. Son los barnices de más calidad comercializados por las distintas marcas. Están diseñados para obtener unos acabados extremadamente brillantes sin necesidad de recurrir a técnicas más costosas o arriesgadas como el doble barnizado, la aplicación de un mayor número de capas de barniz o la sobrecarga.
Barnices mate. Estos barnices permiten obtener acabados totalmente mates o con distintos niveles de brillo cuando son mezclados en proporciones concretas con barnices con brillo. Actualmente, el desarrollo de estos barnices ha hecho que algunas marcas obtengan los satinados a través de la mezcla de
lacas mate específicas en distintas proporciones sin necesidad de utilizar barnices con brillo. Cuando una gama o marca determinada de barniz no dispone de productos de acabado mate, el satinado se obtiene utilizando proporciones concretas de productos específicos denominados matizantes.
Barnices especiales. Son barnices destinados a conseguir efectos concretos (por ejemplo con
efecto goma) o ser empleados con pinturas especiales (por ejemplo para
acabados candy).
Según su sistema de secado
Según su sistema de secado se diferencian los siguientes tipos de lacas:
Barnices de un componente (1K). Son barnices que se suministran en
formato de aerosol y que secan físicamente al evaporarse los disolventes cuando entran en contacto con el aire de la atmósfera. Este formato de barniz para coche seca más rápido, pero ofrece un acabado más pobre (capa seca reducida, menor capacidad de brillo, menor tolerancia a la corrección de defectos, etc.), por lo que está indicado para pequeños retoques o pintado de piezas pequeñas.
Barnices de dos componentes (2K). Son barnices que presentan un mejor acabado y unas mejores prestaciones en cuanto a micraje de la capa resultante, nivel de brillo, etc. Este formato seca por reacción química al entrar en contacto con un catalizador. Se suministran en lata o en aerosol. Los formatos en lata se aplican con pistola aerográfica y son los más utilizados en los talleres de carrocería, mientras que los formatos en aerosol cumplen las mismas funciones que los de 1K pero con la mejora de las prestaciones mencionadas.
Preparación de fondos específica para aplicar barniz
De igual manera que otras pinturas, es fundamental que el soporte esté perfectamente preparado antes de aplicar una laca. Solo de esta forma, se consigue contribuir a la obtención de mejores acabados.
La preparación de fondos específica para aplicar el barniz se da cuando en el taller se realizan difuminados del color dentro de una misma pieza o parches perdidos con la misma laca.
Cuando se realiza el difuminado del color dentro de la misma pieza, la zona en la que no se vaya a aplicar el color debe estar lijada con una de estas opciones:
Lijado en seco y con interface con grano mínimo P-600, aunque se aconseja lijar o afinar hasta P-800. Los bordes deben lijarse como mínimo con esponja ultrafina o P-800. De esta forma queda garantizada la no aparición de rayas de lijado que, además, restarían brillo al barniz. También se pueden utilizar los discos de lijado tridimensionales más finos de cada fabricante.
Por otro lado, cuando se realiza un parche perdido, además de estas opciones de lijado, es fundamental complementar la preparación del soporte con un pulido previo en la zona del difuminado que elimine restos de suciedad (para evitar que tras el pulido del difuminado aparezcan cercos) y un posterior lijado con el abrasivo tridimensional más fino que suministre el fabricante (utilizar otro abrasivo más grueso puede hacer que se aprecien las rayas tras los procesos de pulido).
Por último, en ambos casos, el proceso de preparación del soporte finaliza con el desengrasado de la pieza, por ejemplo con un limpiador como
TEROSON VR 20, y con el posterior soplado y eliminación de motas de polvo residuales con un paño atrapapolvos.
Relación de mezcla del barniz
La relación de mezcla establece la proporción de barniz, catalizador y, en ocasiones, de diluyente que se debe añadir para obtener una mezcla ajustada a los requerimientos del fabricante. Gracias a esta proporción, el comportamiento de la mezcla va a ser el adecuado respecto a fluidez, tiempo de secado y aplicabilidad.
La relación de mezcla viene facilitada por el fabricante de la laca, tanto en la ficha técnica como en el mismo bote o lata, y solo es aplicable para barnices de 2 componentes de aplicación a pistola. Un ejemplo de relación de mezcla sería 2:1:1, la cual establece que por cada dos partes de barniz se debe añadir una de catalizador y media de diluyente. Para facilitar la mezcla existen reglas específicas y vasos reglados con distintas relaciones de mezcla, así como la posibilidad de efectuar la mezcla a través del pesaje en báscula de precisión.
Aplicación del barniz
Para la aplicación de barnices se recomienda el uso de una pistola híbridas con un pico de fluido de 1,2 o 1,3 mm teniendo en cuenta la
técnica de aplicación de pinturas a pistola. Los barnices HS se suelen aplicar en dos manos, una más ligera y otra más cargada. Sin embargo,en los UHS la primera mano es muy suave y la segunda también cargada. A pesar de ello, siempre es necesario seguir las instrucciones del fabricante.
Conclusión
El barniz para coche es la pintura que culmina el proceso de pintado del vehículo, por lo que su relevancia dentro del proceso de reparación está más que evidente. La correcta elección, mezcla y aplicación del barniz, y la preparación adecuada del soporte específico son fundamentales para obtener unos acabados óptimos.